En este artículo se presenta la reflexión sobre las prácticas clínicas desde dos perspectivas. Por un lado, la de la profesora que las guía y tutela, que presenta lo que pretende que los alumnos consigan y lo que supone este trabajo de tutoría. Y desde la percepción de una alumna que está realizando su primera experiencia práctica en contacto con la realidad de un hospital.
La alumna, a través de su cuaderno reflexivo, muestra como está viviendo esta experiencia, este primer contacto que supone la puesta a prueba de los conocimientos que anteriormente había adquirido, las dificultades que encuentra y cómo las va superando.