Mis padres me han dicho que hoy cuando llegue a clase me despida de mis amigos y profesores porque durante un tiempo nos vamos a vivir a Madrid. El otro día fuimos de nuevo al médico y le dijeron a mis papás que estaba malito; ellos me han dicho que no me preocupe pero que para ponerme bueno tenemos que irnos a un hospital más grande donde me cuidarán y así podré volver pronto a casa. En realidad a mí no me ha importado mucho porque me han comentado que nos vamos a vivir a la Casa Ronald McDonalds Madrid, que está llena de niños como yo, de sitios para jugar, de gente que prepara actividades y al lado del hospital al que tengo que ir.