La atención a la población inmigrante por su variabilidad de orígenes y culturas, hace necesaria por parte del profesional de Enfermería realizar una valoración donde queden reflejados los distintos modelos culturales relativos al propio cuerpo, a la salud y la enfermedad y al marco ideológico de valores del inmigrante.
La realización de una valoración centrada en el paciente mediante los patrones funcionales de M Gordon, nos permitirá como en la población autóctona llevar a cabo unos cuidados integrales, con la posibilidad de prestar un trato personalizado y de atención a la diversidad cultural.
La valoración enfermera es un elemento educativo para el desarrollo profesional de las futuras enfermeras facilitando la aplicación de los planes de Enfermería, ya que muchos profesionales establecen diagnósticos enfermeros no acordes con los valores y creencias del paciente inmigrante por su poca formación en el abordaje transcultural.