La crisis económica también llegó a percibirse en Enfermería, cuando miles de profesionales enfermeros, reconocidos internacionalmente por su buena preparación universitaria, se vieron obligados a emigrar al extranjero. Mariló Ballesteros y Marina Barbero fueron dos de ellas y decidieron verlo como una oportunidad, buscando un hueco en Inglaterra con el fin de cumplir su sueño: trabajar como enfermeras.