Hace un año que comenzó todo. Las noticias de todos los medios de comunicación anunciaban la aparición de una nueva enfermedad ocasionada por el virus SARS-CoV-2 en la ciudad de Wuhan, en China. Un virus que llegaba para quedarse más de lo deseado y llevarse muchas vidas por delante. En muy poco tiempo empezaron a aparecer brotes por todos los países, haciendo que más de 115 millones de personas se infectasen por todo el mundo.