A veces hay que probar muchas cosas antes de dar con lo que finalmente es adecuado e ideal para uno mismo. Lucía Martínez estaba trabajando como dependienta en una tienda hasta el momento en el que comenzó la pandemia en marzo de 2020. Viendo a través de los medios de comunicación cómo estaba la situación, la saturación de los hospitales y lo mal que se estaba poniendo todo, decidió ponerse a llamar a todos los centros hospitalarios, enviar currículums, escribir correos… Todo lo que hiciera falta para poder ayudar con la llegada de un virus que nos cambió a todos la vida.