Su familia está repleta de profesionales sanitarios, por lo que tenía bastante claro que quería pertenecer también a este grupo. Después de terminar la carrera le surgió una oportunidad que no pudo dejar escapar: trabajar como enfermera en Suiza. Tras mucho esfuerzo, y pese a lo complicado de aprender un idioma en poco tiempo, Virginia Escovar-Tolosa Martín fue consiguiendo diferentes trabajos y aunque en un futuro no sabe si cambiará de destino, por el momento Zúrich le ha ganado el corazón.