Objetivo: describir la influencia de la comorbilidad y la fragilidad en la calidad de vida de mujeres con edad igual o mayor a 65 años.
Método: se realizó una revisión narrativa. Se llevaron a cabo búsquedas bibliográficas en las bases de datos CINAHL y PubMed desde enero de 2010 hasta noviembre de 2020. Se emplearon las palabras claves “frail elderly”, “comorbidity” y “quality of life”. En PubMed se hizo la combinación (“Frail Elderly”[Mesh] AND “Comorbidity”[Mesh]) AND “Quality of Life”[Mesh]. En
CINAHL se aplicaron los descriptores “quality of life” and “comorbidity” and “frail elderly”. Filtros: idioma inglés y español; mujeres, principalmente; mayores de 64 años; temática de estudio.
Resultados: se encontraron 116 artículos de CINAHL y 80 artículos de PubMed, de los cuales se seleccionaron 37, que enfatizan la fragilidad y la comorbilidad como incidencia en la calidad de vida. La fragilidad es multidimensional y puede ser detectada mediante la evaluación geriátrica integral. La fragilidad afecta a la calidad de vida por lo que es necesario potenciar dicha calidad de vida, mediante la prevención y tratamientos oportunos. A menor comorbilidad mayor calidad de vida. La fragilidad y la comorbilidad en mujeres de edad avanzada son predictores que se asocian con mayor riesgo de muerte.
Discusión: la calidad de vida está influenciada por la comorbilidad y la fragilidad. Las mujeres de 65 años o mayores son población que necesita mayor atención, cuidados, recursos sanitarios y sociales, factores que son imprescindibles para llevar una buena calidad de vida a un coste razonable.