Los bloqueantes beta-adrenérgicos, entre ellos, atenolol, bisoprolol, carvedilol, metoprolol, nebivolol, propranol, reducen la frecuencia cardiaca y la contractilidad miocárdica, lo que a su vez desciende la presión arterial. Por otra parte, disminuyen los niveles de renina circulante, lo que desciende la actividad de la angiotensina II. Todos los beta-bloqueantes tienen una eficacia antihipertensora similar. Se asocian con numerosos efectos adversos en el sistema nervioso central (trastornos del sueño, fatiga, letargo) y exacerban la depresión. El nadolol afecta menos al sistema nervioso central y puede preferirse cuando es necesario evitar estos efectos. Los beta-bloqueantes están contraindicados en ...