Las vías de administración de un fármaco son: vía intravenosa, vía oral, vía sublingual, vía subcutánea, vía intramuscular, vía inhalatoria, via endotraqueal, vía rectal, vía intraósea, vía nasal, vía vaginal, vía ótica, vía oftálmica y vía tópica. Reconociendo el protagonismo que desempeña la vía intravenosa en las situaciones críticas o agudas, parece necesario resaltar la necesidad de emplear, en ocasiones concretas, otro tipo de vías (de las cuales se hablará más adelante) que inicialmente pueden ajustarse mejor a las necesidades de abordaje y tratamiento de pacientes con determinadas patologías, o bien ofrecer una alternativa, cuando menos temporal, a la vía intravenosa. Finalmente,...