La piel es un órgano con funciones complejas, dividido en tres partes diferenciadas: epidermis, dermis e hipodermis.Existen una serie de estructuras anexas denominadas anejos cutáneos, que también juegan un papel fundamental en la piel, como son las uñas, las glándulas (sudoríparas, sebáceas y ceruminosas) y los pelos.El proceso de envejecimiento produce cambios en la piel, no obstante, existen alteraciones de la piel que no pueden estar relacionadas con este proceso. Se encuentran entre estas diversas patologías vasculares, autoinmunitarias, asociadas a linfomas y leucemias, así como los trastornos inflamatorios.